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  • Foto del escritorDaniel González

Montealegre de Campos, mirador al infinito

Existen pueblos, que no son más que eso; otros desprenden en sus callejuelas y monumentos historia y arte; pocos son capaces de transmitir emociones, ya sea desolación e injusticia por su abandono, orgullo por lo contrario o calma por su encanto rural. Montealegre de Campos no es ajeno a la definición de pueblo, tampoco lo es a la historia y el arte, transmite calma por su encanto, orgullo en su castillo e iglesias y cuenta con la excepción tan poco frecuente en estas tierras, el abandono no desnutre su figura.  


Mirador desde Montealegre a Tierra de Campos
Vistas desde Montealegre a Tierra de Campos. Foto: EnPueblo
‘Montealegre sin monte, alegre llano’ Jorge Guillén 

Situada a 33 kilómetros al norte de Valladolid, es su situación estratégica en uno de los extremos de los Montes Torozos el mayor atractivo de Montealegre. Se vislumbra desde su alto unas amplia vista a la extensa llanura de Tierra de Campos, hasta 40 pueblos y si la visibilidad lo permite, también se atisban los montañas del norte de León y Palencia. La localidad se extiende a lo largo del páramo, terminando en su extremo con el ingente castillo, símbolo de la villa y cumbre de Campos.


Castillo de Montealegre de Campos
Castillo de Montealegre. Foto: EnPueblo

Conjunto Histórico-Artístico 


La fortaleza del siglo XIV-XV, de planta cuadrada y muros de 20 metros de altura y 4 de espesor, nunca fue conquistada, posee tres plantas y un espacioso patio interior. En los años 1960 se rodó parte de la película “El Cid” con Charlton Heston, al igual que en otros castillos de la provincia como el de Torrelobatón. El edificio fue restaurado y hoy alberga el Centro de Interpretación de la Edad Media. Todo ello convierte a este histórico castillo en uno de los tesoros más preciados de la provincia y  sitúa a la localidad de los Montes Torozos en el mapa turístico.



Callejuela de Montealegre de Campos
Una de las pintorescas callejuelas del pueblo. Foto: EnPueblo

Lo peculiar de Montealegre de Campos se encuentra en la calle Nicolás Rodríguez, también conocida como la “Calle Mayor” que atraviesa de sur a norte todo el pueblo y cuya corriente desplaza al viandante al castillo donde desemboca. El pueblo está ornamento prácticamente en piedra, dando lugar a bellas travesías y rincones que descubren los principales monumentos, fachadas de casonas tradicionales, así como las ya citadas vistas que rodean a la villa.


De su patrimonio religioso, son testigos la Iglesia de Santa María del siglo XVI construida enteramente en piedra, con espadaña y figura austera, y la Iglesia de San Pedro del siglo XVII, también construida en piedra, en cuyo interior se guarda un valioso retablo mayor renacentista, con 16 escenas de la vida de San Pedro. Esta última iglesia es la que presenta un peor estado de conservación. El patrimonio lo completan la Ermita del Humilladero que se encuentra a la entrada del pueblo y la Ermita de Nuestra Señora de Serosas, situada en la carretera que conecta Montealegre con Valdenebro de los Valles y conocida popularmente como “la estrella de Campos”.


Calle Santa María de Montealegre de Campos
Calle Santa María. Foto: EnPueblo

Montealegre resume su valor en el conjunto de su patrimonio natural, artístico y popular, que presenta al pueblo como uno de los más completos de la provincia, ayudado también por un entorno envidiable y una belleza castiza. Un pueblo donde nada sobra y donde poco falta; por esta razón Montealegre de Campos está declarado Conjunto Histórico-Artístico, aunque no es necesario un título vacío para darse cuenta de que la villa es algo más que historia y arte. Es también el juego de las tonalidades pardas del adobe y blancas de la piedra, son sus vistas testigo del paso de las estaciones, es la simple esencia de un pueblo castellano.




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