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  • Foto del escritorDaniel González

Villalba de los Alcores, un tesoro deslucido

Al norte de la provincia, cerca de uno de los muchos alcores de los Montes Torozos se levanta esta monumental villa, dotada de un valioso patrimonio, capitaneado por el magnífico castillo del siglo XIII, declarado Monumento Nacional en la II República. Se puede describir a Villalba de los Alcores como un tesoro que a duras penas se conserva pero que permite entrever el carácter histórico-artístico del pueblo.


Castillo de Villalba de los Alcores
Castillo de Villalba de los Alcores. Foto: EnPueblo

Villalba condecorado con numerosos monumentos declarados de interés es un digno ejemplar más de un una larga lista de municipios que, a pesar de sus gran potencial, no luce como debería. Dotado de una historia envidiable, la villa no deja de ser un escondite, un lugar que pasa desapercibido por las grandes rutas turísticas, y cuya consecuencia es el inevitable desprecio de este pueblo, que pasa a medirse exclusivamente por la tradicional cantidad de “bares” que posee.



Dos de los monumentos más valiosos del municipio están en manos de particulares, el castillo de Villalba y la Iglesia de Santa María del Templo. Los orígenes de la fortaleza datan del siglo XII y XIII, aunque existen diferentes teorías sobre su verdadero promotor, que van desde la Familia Meneses a la Orden de San Juan. En la actualidad, el castillo pertenece a los descendientes de Manuel Azaña, no se permite la entrada y permanece en estado de abandono. La imponente fortaleza declarada Monumento Nacional-Artístico solo cuenta con un esquivo cartel informativo a la entrada de la propiedad que recita su historia. En resumidas cuentas, los ojos solo ven lo que sus enormes dimensiones permiten.


Iglesia de Santa María del Templo de Villalba de los Alcores
Iglesia de Santa María del Templo. Foto: EnPueblo

La misma suerte y características manifiesta la Iglesia de Santa María del Templo, románica cisterciense del siglo XII y declarada Bien de Interés Cultural. El templo fue cerrado al culto en 1818, y desde entonces ha presentado diversos usos: teatros de comedias, salón de baile, molino y almacén; ahora se encuentra en estado de ruina. A pesar de su situación actual, todavía se percibe la forma sencilla y austera del templo, así como la portada románica con arquivoltas. El otro templo, sí disponible al culto, es la Iglesia de Santiago Apóstol que presenta diferentes corrientes artísticas desde el románico al gótico y renacimiento.


Muralla de Villalba de los Alcores
Uno de los cubos que se conservan de la muralla de Villalba de los Alcores. Foto: EnPueblo

Otro emblema destacado de la localidad es la muralla del siglo XII, que aún conserva parte de los cubos que tenía.  Actualmente, solo quedan siete de ellos desperdigados por el entramado urbano de los 36 que llegó a tener. Las dimensiones de la pretérita muralla unidos al monumental castillo dan constancia del pasado admirable de la villa. El toque final de Villalba lo ofrecen sus calles con casas construidas según la arquitectura popular, pozos y callejuelas, donde la piedra se convierte en el principal protagonista.


Villalba de los Alcores, situada en uno de las comarcas más emblemáticas, se convierte en una parada obligada en las rutas turísticas de la provincia, no solo por su monumentalidad e historia, sino también para dar conciencia de que gran parte del valioso patrimonio de la provincia está abandonado y dejado a la naturaleza del tiempo.




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